Más allá de Van Gogh: The Immersive Experience.

 

ABRAZANDO LA LIBERTAD

Una exposición sobre un pintor de renombre sin las pinturas mismas es una tarea imposible transformada aquí en una oportunidad increíble. Una oportunidad para abrazar no solo un notable corpus de obra, sino también la libertad con la que Van Gogh vio su oficio y el mundo que lo rodeaba. Esta experiencia busca, al igual que el propio maestro partir con algo que conocemos y podemos extrapolar de él. La improbable combinación de lo digital y lo clásico le permite a uno sumergirse en este mundo de la pintura, para experimentarlo desde adentro, vibrar con él. A través de este juego de escalas e imágenes, lo habitual se convierte en improbable. Esta experiencia busca ir más allá del mito, más allá de las imágenes, para adentrarse en la obra misma.

1853 DESDE EL PRINCIPIO

Van Gogh nació en 1853 en una familia en la que muchos cultivan lazos con el mundo del arte. Fascinado desde el principio por la pintura, aprende a dibujar por sí mismo, basándose en la historia del arte e inspirándose en el campo. Pero pasarían muchos años antes de que aceptara plenamente su verdadera vocación.

“Pero cual dirías que es tu objetivo final. Ese objetivo se hará más claro, ira tomando forma de manera lenta y segura, de la misma manera que el croquis se convierte en un boceto y el boceto en una pintura.

A Theo Van Gogh, Cuesmes 22-24 de junio de 1880.

1872-DOS HERMANOS

Inseguro de su camino, Van Gogh primero considera ser un comerciante de arte. Su hermano Theo y él comienzan a trabajar para el mismo concesionario de arte, Theo en Bruselas, Vincent en La Haya, Aunque este esfuerzo terminaría siendo un éxito para Theo y un fracaso para Vincent, 1872 marca el comienzo de la correspondencia entre los dos hermanos.

"Estoy muy contento de que ambos estemos ahora en la misma línea de negocio y en la misma empresa; debemos escribirnos a menudo"

A Theo Van Gogh, La Haya, 13 de diciembre de 1872.

DICIEMBRE DE 1888 - EL INCIDENTE

A petición de Theo, Gauguin llega a Arles para pintar junto a Van Gogh. Este último tiene grandes esperanzas de formar una hermandad de artistas con ideas afines. Sin embargo, las tensiones crecen entre los dos. Van Gogh se vuelve delirante y Gauguin amenaza con irse. Las cosas se intensifican y culminan cuando Van Gogh se corta notoriamente su propia oreja.

“Ahora hablas del vacío que a veces sientes; eso me pasa a mí también"

A Theo Van Gogh, Arles, 29 de julio de 1888.

"Van Gogh en la puerta de la eternidad". El biopic que el director neoyorquino Julian Schnabel ha dedicado al pintor neerlandés. Disponible en Prime Video.

RETRATANDO LA ESENCIA

Sin contar con los medios para pagar los servicios de los modelos, Van Gogh resolvió pintarse a sí mismo y a quienes lo rodeaban. Consideraba que los retratos eran una de las formas de arte más elevadas y aspiraba a ser retratista. Mientras que sus primeros retratos muestran a sus modelos en sus propios escenarios, expresando su individualidad, sus retratos posteriores parecen apuntar a algo más esencial. Con el arte de su pincel, sus amigos y conocidos se convirtieron en algo más que ellos mismos: se convirtieron en arquetipos. Colocados frente a fondos estampados o monocromáticos, imposibles de ubicar, y así se convirtieron en el espejo en el que uno podría proyectarse. Experimentar su obra es contemplar y meditar sobre la humanidad misma.

CONVIRTIENDO LO ORDINARIO EN EXTRAORDINARIO

Desde muy temprano, Van Gogh mostró interés por la vida cotidiana rural. Desconcertado por el canon clásico, como muchos artistas en ese momento, Van Gogh comenzó a mirar a su alrededor en busca de inspiración. Con ricos tratamientos de color y un complicado juego de profundidad, transformó lo ordinario en algo extraordinario. Un par de botas, una simple silla, la vista por la ventana, el propio dormitorio; los elementos más comunes a su alrededor parecían imbuidos de potencial no sólo por su belleza sino también por una especie de simplicidad sublime. Experimentar su obra es apreciar la belleza de las cosas más simples.

"Hay dos cosas que siguen siendo eternamente ciertas y que en mi opinión se complementan entre sí: no apagues tu inspiración y poder de imaginación, no te conviertas en un esclavo del modelo; y la otra, toma un modelo y estúdialo, porque de lo contrario tu inspiración no se podrá materializar”.

A Theo Van Gogh, La Haya, 5 de noviembre de 1882.

TURBULENCIA ARREMOLINADA

Inspirado en gran medida por las pinceladas más sueltas de los impresionistas y la aplicación del color de los puntillistas, Van Gogh creó un corpus de obra no sólo lleno de color, sino también vivo en cuanto a movimiento. Los pigmentos puros ya no se mezclan, sino que se aplican uno al lado del otro, se arremolinan en la superficie con una energía increíble. Haciéndose el tímido con el realismo, Van Gogh pretendía ser más verdadero que la verdad, expresar tanto lo visible y también lo que había más allá. Los colores vivos, las pinceladas impetuosas, las perspectivas sesgadas y los contornos fuertes dieron vida a su trabajo y dieron sustancia a su visión. Para experimentar su trabajo hay que ceder ante la turbulencia.

1890-MAS ALLA DE VAN GOGH

Aunque Van Gogh luchó toda su vida para ganarse la vida con su arte, desapareció justo cuando su trabajo ganaba el reconocimiento de la crítica. Incómodo ante los críticos y eligiendo firmar humildemente como “Vincent” por temor a que su apellido fuera demasiado difícil de pronunciar Van Gogh estaba lejos de imaginar el legado inconmensurable que dejaría para el mundo. El simple Vincent siempre estuvo más allá de Van Gogh.

"Para tener éxito, para tener una prosperidad duradera, uno debe tener un temperamento diferente al mío, nunca haré lo que pude haber hecho y debí haber querido y procurado. […] Si bien siento claramente el valor, la originalidad y la superioridad de Delacroix, de Millet, por ejemplo, me aseguro de decirme a mí mismo, sí, soy algo, puedo hacer algo”.

A Theo Van Gogh, Saint-Rémy-de-Provence, 10 de septiembre de 1889.

“¿Qué soy yo a los ojos de la mayoría de la gente? Un nadie o una rareza o una persona desagradable, alguien que no tiene y no tendrá una posición en la sociedad, en resumen, estoy un poco más bajo que lo más bajo. Muy bien, suponiendo que todo es realmente así, entonces a través de mis trabajo me gustaría mostrar lo que hay en el corazón de un raro, de un don nadie”.

A Theo Van Gogh, La Haya, 21 de julio de 1882.

1888- BAJO EL SOL

París y su frenético estilo de vida empiezan a pesar sobre Van Gogh. Anhela el campo y una conexión más profunda con la naturaleza. Decide trasladarse a Arles, en el Sur de Francia, iniciando así uno de sus períodos más turbulentos pero también más prolíficos.

“Tengo muchos problemas para pintar debido al viento pero fijo mi caballete a clavijas fijadas en el suelo y así trabajo de todos modos, es demasiado hermoso".

A Theo Van Gogh, Arles, 1 de abril de 1888.

Willem Dafoe interpreta a Vincent Van Gogh 'En La Puerta De La Eternidad'.

FRATERNIDAD

El arte de Van Gogh y sus propias palabras son inseparables. A través de la asidua y abundante correspondencia con su hermano Theo, se da voz a la obra de Van Gogh. Con sinceridad y claridad, el artista revela no sólo su proceso y sus intenciones, sino también su profunda humanidad. Gran parte del éxito posterior y el considerable legado de Van Gogh se deben al amor, la dedicación y la fe de Theo en el inmenso talento de su hermano. Vinculados por algo más que una hermandad, Vincent y Theo, sin saberlo, compartieron un cuerpo de palabras y colores que trasciende el tiempo y aún resuenan hasta el día de hoy. Experimentar el trabajo de Van Gogh es conocer al hombre más allá del mito.

“… Siempre pienso que lo que necesitamos es la luz del sol y el buen tiempo y el aire azul como el remedio más confiable".

A Theo Van Gogh, Arles, 29 de septiembre de 1888.

NATURALEZA CURATIVA

La naturaleza es fundamental para la obra de Van Gogh. Se esfuerza, como ya se revela en sus primeras obras, por mostrar la verdadera belleza de la tierra y de quienes la trabajan y sus últimas obras abrazan plenamente la exuberancia de la naturaleza. Sintiéndose más a gusto lejos de la ciudad, Van Gogh buscaba el campo tanto por su riqueza visual como por su calidad curativa. Fascinado por el ciclo de la vida y por figuras como el segador y el sembrador, Van Gogh inundó su paisaje con una sensación de trascendencia. Experimentar su obra es reconectarse uno mismo con la naturaleza imponente.

1889-UNA PEQUEÑA HABITACION CON CORTINAS VERDE AGUA

Poco tiempo después del incidente de la oreja, Van Gogh se interna en un manicomio en Saint-Rémy-de-Provence. A pesar de los episodios de enfermedad, sigue trabajando, creando algunas de sus obras maestras más famosas como La noche estrellada, inspirada en la vista desde su ventana en el asilo de Saint-Paul.

"A través de la ventana con barrotes de hierro puedo distinguir un cuadrado de trigo en un recinto […] por encima del cual por la mañana veo salir el sol en toda su gloria".

A Theo Van Gogh, Saint-Rémy-de-Provence, 23 de mayo de 1889.

1886 - CIUDAD LUZ

En marzo de 1886 Van Gogh se traslada a Paris y se reencuentra con su hermano Theo. La Ciudad Luz es entonces el hogar de los impresionistas: su uso del color y su sentido de libertad coloca a Van Gogh en un camino hacia la luz, comienza a utilizar pinceladas más sueltas y a emplear una expresión desenfrenada.

"[…] desde que vi a los impresionistas, les aseguro que ni su color ni el mío tal como se va desarrollando, es exactamente igual a sus teorías pero tanto me atrevo a decir, tenemos una oportunidad y una buena que es encontrar amigos".

A Horace Mann Livens, Paris, septiembre u octubre de 1886.

1877 - ENSAYO Y ERROR

Habiendo fracasado como comerciante de arte y como tampoco estaba listo para dedicarse a la pintura, Van Gogh decide convertirse en predicador, como su padre. Sin embargo, estudiar y predicar resulta ser más difícil de lo previsto y todo el esfuerzo termina una vez más en fracaso.

"Ahora que estoy pasando por la dura prueba de los exámenes, simpatizo con otros en la misma posición […]. Cualquiera que aspire a un puesto en la sociedad debe pasar por una época de grandes dificultades y esfuerzo, el éxito puede depender de pequeñas cosas".

A Theo Van Gogh, Amsterdam 3-4 de diciembre de 1877.

"Me gustaria caminar contigo para averiguar si miramos las cosas de la misma manera".

A Theo Van Gogh, Amberes, 28 de noviembre de 1885.

“También creo que puede suceder que uno tenga éxito, y no hay que empezar por desesperarse; incluso si uno pierde aquí y allá, e incluso si a veces se siente una especie de declive, el punto es, sin embargo, revivir y tener coraje, aunque las cosas no salgan como se pensó en un primer momento".

A Theo Van Gogh, La Haya, 22 de octubre de 1882.

“… encuentra tantas cosas bellas como puedas, la mayoría de las personas encuentran demasiado poco que es bello”.

A Theo Van Gogh, Londres, enero de 1874.

MAS ALLÁ DEL MITO, MAS ALLÁ DE LA IMAGEN

A menudo descrito como una figura aislada, Van Gogh anhelaba sin embargo conectarse con otros a lo largo de toda su vida. Primero tratando de ser un predicador, luego tratando, sin éxito, de formar una hermandad de artistas con ideas afines, Van Gogh quería ante todo comunicarse. Pintar para él era mucho más que aplicar color a un lienzo; se trataba de transmitir un mensaje, Su popularidad duradera parece indicar cuánto de este mensaje todavía resuena en la actualidad. Para experimentar su obra es necesario conectarse con su atemporalidad.

La mejor experiencia inmersiva que hayamos tenido. Lima, 20/03/2022.